El trading en entornos de aversión o propensión al riesgo

Se dice que un entorno está en modo de aversión o propensión al riesgo dependiendo de cómo el mercado en general perciba un evento concreto. Para ser más exactos, representa la reacción del mercado a un suceso específico y esta reacción puede tardar un día, una semana o incluso más. Las operaciones en los mercados de divisas se basan totalmente en las percepciones, especialmente hoy en día, cuando los humanos siguen a los robots. Por lo tanto, la percepción de un evento juega un papel muy importante. A veces el mercado está tan sesgado que los comunicados de índole financiera no tendrán ningún impacto en la tendencia general y el movimiento de contratendencia solo sirve para abundar en la posición inicial. Las tendencias muy marcadas tienen a estar correlacionadas entre las divisas Forex y esto es lo que se conoce como entorno de aversión o propensión al riesgo.

Definición de un entorno de aversión o propensión al riesgo

Cualquier bróker de Forex ofrece la posibilidad de operar con múltiples pares de divisas y estos se dividen en dos categorías principales: pares mayores y pares cruzados o cruces. Los pares mayores son pares de divisas que contienen el USD (dólar estadounidense), mientras que un cruce o par cruzado es cualquier otro par de divisas que incluya el dólar. El motivo de esta división de los pares de divisas es que el dólar estadounidense es la divisa de reserva mundial. Esto significa que los cambios de política monetaria que hace la Reserva Federal de los Estados Unidos provocan que el mercado cambie agresivamente. Debido al papel del dólar, los pares de divisas se mueven correlativamente. Si el dólar es alcista, los pares de divisas que contienen el dólar se moverán en la misma dirección y si el dólar muestra tendencia bajista, esos mismos pares irán a la baja. Sin embargo, eso no constituye por sí mismo un entorno de aversión o propensión al riesgo. Tanto el mercado de divisas, como los de renta variable y materias primas también influyen.

Cómo operar en un entorno de aversión al riesgo

Un entorno de aversión al riesgo es un entorno en el que el sentimiento del mercado es negativo. Ante estos entornos, los inversores o traders buscan refugiarse en las divisas que se perciben como más seguros. El CHF (franco suizo) y el JPY (yen Japonés) son divisas que se suelen comprar en entornos de aversión al riesgo, ya que se perciben como divisas refugio. Cuando esto sucede, los pares USD/CHF y USD/JPY se mueven a la baja. Un entorno de aversión al riesgo también arrastrará a la baja los índices de renta variable de los Estados Unidos, lo que a su vez hará que el conjunto de la bolsa muestre tendencia bajista. No es ningún secreto que la globalización hace que productos financieros se muevan correlativamente. El USD/CAD es un par de divisas que en condiciones así suele moverse al alza, pero este par de divisas está influido por el mercado del petróleo. Esto hace un poco más difícil predecir sus movimientos y no siempre se asocia con un sentimiento de aversión al riesgo. El ejemplo clásico y también el más reciente, tuvo lugar cuando la elección presidencial de los Estados Unidos se celebró a principios de noviembre de 2017. La elección del Donald Trump como Presidente de los Estados Unidos fue percibida por los mercados como un factor de riesgo, más que la posible elección de la Hillary Clinton. Esto hizo que ocurrieran constantemente movimientos de precios relacionados con aversión al riesgo como los antes descritos, a medida que se iban publicando noticias positivas sobre Trump. Este mismo entorno se mantuvo firme durante en la carrera presidencial e incluso durante la noche de las elecciones. Sin embargo, cuando resultó obvio que Trump iba a ganar la elección, el mercado cambió de tendencia y en lugar de mostrar un sentimiento de aversión al riesgo, pasó un modo de propensión al riesgo.

Cómo operar en un entorno de propensión al riesgo

El sentimiento de propensión al riesgo es exactamente lo contrario que el de aversión y significa que el mercado muestra una tendencia alcista. ¡Hablando siempre del mercado de renta variable, claro! Desde el punto de vista de los pares de divisas, algunas se moverán al alza, otras a la baja, pero el concepto principal en general es que el dólar estadounidense se comprará frente a las divisas que se perciban como representativas del riesgo. Por lo general, un entorno de propensión al riesgo se describe como un movimiento correlacionado que hace que los pares USD/CHF, USD/JPY y los índices de equidad muestren una tendencia alcista. Por otro lado, el par USD/CAD se moverá a la baja, ya que lo más probable es que el precio del petróleo suba. Cabe destacar aquí que los movimientos de aversión y propensión al riesgo eran distintos hace algún tiempo. Se solía considerar que las subidas de los pares de divisas EUR/USD, GBP/USD, AUD/USD y NZD/USD y la bajada del par USD/CAD eran indicativos de un clima de propensión al riesgo. En general, el dólar se vendía agresivamente en entornos de este tipo. Esto cambió recientemente cuando los bancos centrales situaron los tipos de interés en territorio negativo y se embarcaron en políticas monetarias poco convencionales. Los programas de flexibilización cuantitativa que se llevaron a cabo -y que todavía están en vigor- en todo el mundo distorsionaron la percepción que antes se tenía respecto al riesgo. Bajo estos programas, los bancos centrales compran los bonos de sus propios gobiernos, con la intención de crear inflación. Los mercados tuvieron que adaptarse a esta nueva realidad y actualmente estamos viendo tipos de interés negativos en las jurisdicciones de muchos bancos centrales de todo el mundo. Este entorno marcado por los tipos de interés negativos tiene como objetivo estimular a los bancos comerciales para que presten más dinero a la economía real, creando así puestos de trabajo y facilitando que se recupere el crecimiento económico. La inflación subirá de la mano del crecimiento económico y cuando eso suceda, los bancos centrales normalizarán su política monetaria. Sin embargo, hasta que eso ocurra, los mercados se han adaptado a las nuevas realidades y se han redefinido los sentimientos de aversión o propensión al riesgo. Como regla general, se considera que una operación con aversión al riesgo es aquella en la que se venden las divisas de más riesgo frente a cualquier otro valor. Estas monedas son el CHF y el JPY.

Una situación de aversión al riesgo significa un entorno con tendencia bajista o negativa, en el que el sentimiento de pánico se adueña de los mercados. Por lo general, en una situación de pánico los precios se mueven más rápido que en un entorno alcista y en este contexto, los traders tienen que reaccionar muy rápidamente. Anticipándose a los eventos que se consideran de riesgo, los brókers de Forex suelen enviar mensajes de e-mail anunciando a sus clientes que los requisitos de margen están aumentando. En este entorno también son de esperar spreads más amplios y normalmente las órdenes de detener pérdidas y tomar beneficios se ejecutan con deslizamiento. Bajo un entorno de propensión al riesgo, la tendencia del mercado es alcista y los pares de divisas se mueven a un ritmo normal. Después de todo, un entorno alcista se considera como positivo. Saber qué esperar desde el punto de vista de un entorno de aversión o propensión al riesgo ofrece los traders una ventaja competitiva. Esto es muy útil para evitar el hacer demasiadas operaciones, gracias a la ayuda de las correlaciones de trading.